Hola María. No sé si te acordaras de mí, hace mucho tiempo que no tenemos noticias. Hagamos una prueba de tu memoria: Me hiciste vagar por las calles sin rumbo, sin objetivo. Me sugeriste comprar adornos bonitos y colgarlos bajo el techo de mi cuarto. Te reías a boca llena cuando desplegaba el itinerario de tareas –te recuerdo que era…
